miércoles, 10 de febrero de 2010

Queremos....


Dos son las metas del “Equipo Itinerante” de la Escuela de Evangelización “Mazetés”, a saber:

Ø  Convertir a cada católico en un evangelizador.
      Pretende convertir a todo bautizado en un testigo de la resurrección de Cristo Jesús. Ser testigo por su estilo de vida y dar testimonio con su palabra, dando razón de su esperanza.

      Concienciar  que católico es sinónimo de evangelizador. Católico que no evangeliza, no puede ostentar tan glorioso título. Católico que no es testigo y no da razón de su esperanza, no es católico, aunque cumpla con ciertas prácticas de piedad o devoción. Si católico significa “universal”, no puede existir auténtico católico que de alguna manera no esté llevando la buena nueva hasta los confines de la tierra. Sería una contradicción de términos. Sería como un fuego que no quema, luz que no ilumina o sal que ha perdido su sabor.

Ø  Dinamizar las estructuras.

      La Escuela de Evangelización se propone dinamizar las estructuras ya existentes. Por tanto, no se trata de una super estructura ni de otro movimiento más, sino de un espíritu y una motivación que ayude y promueva lo que existe en la Iglesia. Es simplemente como ponerle baterías nuevas a la pastoral ya existente, para que todos recobremos nuestro dinamismo evangelizador y vivamos nuestra confirmación, que nos ha convertido en instauradores del Reino de Dios en este mundo.

      El éxito de las  Escuelas de Evangelización  2000 es ayudar a que todos los movimientos y estructuras de la Iglesia tengan éxito en su labor evangelizadora.

            Como Escuela de Evangelización partimos del principio de que no puede darse la evangelización si antes no se forma a los evangelizadores, y éstos hay que capacitarlos para que cumplan eficazmente su misión, proveyéndolos de instrumentos pedagógicos, pastorales y doctrinales para que todo aquel que reciba una enseñanza, sea a su vez capaz de retransmitirla.

            Las Escuelas de Evangelización no son principalmente para evangelizar, sino para formar evangelizadores. Especialmente se pone el acento en la parte práctica de cómo evangelizar así como en trabajar con el factor multiplicador preparar formadores de evangelizadores, como lo hizo Jesús con los Doce y Pablo con los suyos: 2Tm. 2,2.

                        El objetivo del “Equipo Itinerante”, es servir a los grupos existentes en la pastoral de la Iglesia, fomentando el intercambio de recursos pedagógicos, metodológicos y didácticos que fortalezcan y consoliden su quehacer evangelizador. Esto lo realizamos por medio de los retiros y cursos con los que contamos (ver folleto ”cursos”).

“La Obra de Evangelizar nos compete a todos:
es una obligación de cada bautizado,
 un deber de todo confirmado y una responsabilidad de todo seguidor de Jesús”
Evangelización 2000